orientationchange Not Supported on this Device.

PROYECTOS
ISLA PEDRO GONZALEZ
Archipiélago Las Perlas, Panamá

Ubicada en la costa oeste de Panamá, la Isla Pedro González es la tercer isla más grande del archipiélago Las Perlas. Conocida por su costa virgen, y su suave vegetación en declive, la isla posee doce playas sin desarrollar, 15 kilómetros cuadrados de bosque y una villa de pescadores preexistente, que alberga a cerca de 400 residentes. Para poder preservar el paisaje actual y ofrecer un patrón de desarrollo sostenible y compacto a la región de Panamá, el masterplan de la Isla Pedro Gonzalez agrupa todo nuevo desarrollo en siete comunidades pedestres, íntimas, conectadas por una red de caminos y espacios verdes. Este estilo de desarrollo mantiene la belleza natural de la isla al mismo tiempo que se crean vecindarios comunitarios memorables con una serie de ofertas comerciales, de oficina y residencial. Todas las comunidades están planificadas con medidas ambientalmente sustentables y de eficiencia energética, incluyendo iniciativas de electricidad autónoma residencial. Una reserva forestal ofrece espacio abierto y mantiene el hábitat de anidación de tortugas locales y pájaros marinos. Las comunidades son nombradas por su característica recreacional principal, incluyendo: Villa Golf, Villa Playa, Villa Bosque, Villa Pescadores, cada una de las cuales utiliza su propio componente de uso mixto, como por ejemplo: tiendas de vecindario, espacios cívicos y parques diseñados en base a las características naturales del terreno. La arquitectura, inspirada en la vernácula local, caracteriza generosos espacios exteriores como galerías, balcones y porches diseñados para servir como puntos de reunión comunitarios y responden al clima local. La red de caminos de la isla conecta los vecindarios y sigue la topografía de la isla para maximizar las vistas, cruzando los vecindarios, la reserva natural, playas, el campo de golf y los lotes de hacienda mayores. Adicionalmente, una red vehicular diseñada para carritos de golf con motor eléctrico ofrece una experiencia pedestre íntima, a la altura de una aldea de la Europa medieval.